Cal Granotes es una curtiduría del siglo XVIII, situada en pleno corazón del barrio del Rec, y muy cerca del canal o acequia (rec, en catalán) que le da nombre. Conserva intactos los elementos más característicos de una curtiduría de hace trescientos años y, a través de una atractiva puesta en escena del oficio y sus herramientas, explica el proceso artesanal utilizado antes de la industrialización. La visita empieza en la planta baja o ribera (en los fosos donde se remojaban, pelaban, descarnaban y curtían las pieles) y continúa en la planta superior o tendedero (lugar donde se secaban, estiraban, engrasaban y pulían). Un proceso manual y laborioso, que duraba un año entero y que, en la actualidad, no supera las dos semanas.

El Museo de la Piel está situado en un edificio emblemático, Cal Boyer, una fábrica algodonera de finales del siglo XIX. Ofrece exposiciones permanentes dedicadas a explicar el uso de la piel y el legado de la vocación curtidora de Igualada, y una propuesta sobre la obtención y el uso del agua.

Sala El oficio de curtidor
Igualada cuenta con generaciones de blanquers que se han dedicado a curtir la piel. Esta exposición muestra, en primer lugar, cómo era la actividad preindustrial en las fábricas que nacieron tan cerca de un canal o acequia (rec, en catalán) y que, al mismo tiempo, provocaron el surgimiento de un nuevo barrio. A continuación, se sigue el camino que lleva a la industrialización, a partir de las primeras máquinas accionadas con nuevas fuentes de energía, que se iban incorporando a las curtidurías para acelerar los procesos de remojo, de descarnado y división y acabado de las suelas –las pieles de vaca características de Igualada— y que, durante el siglo XX, contribuyeron a consolidar esta actividad como una de las más singulares de la ciudad.

Sala Un universo de piel
A lo largo del recorrido por este espacio, se descubre que la piel acompaña el desarrollo de la humanidad desde sus inicios, y que está presente en ámbitos tan variados como la indumentaria, el utillaje, el transporte, la escritura o el deporte, entre otros. Dispone de una cuidada selección de objetos que van desde la época romana hasta el siglo XX, y que pertenecen a entornos cercanos o a culturas lejanas, confeccionados total o parcialmente con piel, que ejemplifican las múltiples aplicaciones y utilidades de este materia tan preciada.

Espacio El hombre y el agua
En este ámbito se presenta una visión general de la obtención y del aprovechamiento del agua. A lo largo de la historia, abundan ingenios de todo tipo para captarla y poder sacarle todo el rendimiento, ya sea en la agricultura, en la vida cotidiana o como fuente de energía. A través de la colección de útiles e ingenios hidráulicos, se muestran los distintos métodos de aprovechamiento del agua y, en el canal de experimentación, se pueden poner en marcha algunas maquetas para comprender su funcionamiento.

Villa romana de l’Espelt. Una villa a descubrir

Esta villa es un yacimiento arqueológico con vestigios de una explotación agropecuaria mayoritariamente del siglo II dC, y está situada en el núcleo de l’Espelt (Òdena), cerca de Igualada. Rodeada de campos de cultivo de cereales y árboles de secano, nos brinda un entorno natural similar al que debió tener en época romana. Se trata de la villa romana más relevante de la comarca de l’Anoia y está declarada bien cultural de interés nacional. Para más información:

Villa Romana de l’Espelt

Igualadina Algodonera.
Símbolo de la primera revolución industrial en Catalunya

Es un conjunto también conocido como el Vapor Vell. Construido hacia 1842, es la fábrica más antigua conservada en Catalunya del llamado estilo Manchester, con la estructura original, y sin intervenciones posteriores relevantes. Fue uno de los principales centros productores de hilo y tejidos de algodón durante la revolución industrial de Catalunya y funcionó hasta el año 1967. Fue declarada bien cultural de interés nacional en 1997. Para más información:

 IGDA. Conoce la historia de Igualada. Igualadina Algodonera 

Sant Jaume Sesoliveres.
Ochocientos años de historia escrita en las paredes

Las paredes de esta iglesia del camino de Santiago nos permiten leer su vida, desde su nacimiento casi milenario o el uso del primer piso como granero, hasta la destrucción debida a un terremoto. Construida a finales del siglo XII, fue restaurada a finales del siglo XX, buscando mantener una visión histórica del edificio y dejando visibles las huellas del tiempo. Es bien cultural de interés nacional. Para más información:

 IGDA. Conoce la historia d’Igualada. Cal Pasqual 

Estos espacios se pueden visitar, con concertación previa, llamando al 938046752 o escribiendo a m.igualada@diba.cat.